POLICLÍNICO UNIVERSITARIO ¨PEDRO BORRÁS ASTORGA¨ .PINAR DEL RÍO
Traumatismo en Atención Primaria
Trauma in primary health care
Francisco Juan Pérez Llabona1, Idairys Llamazares Pérez2, Carlos Alberto Hernández Cuado3, Fredy Elier Torres Cordero4
1Estudiante de sexto año de Medicina. Alumno ayudante de Medicina Interna.
2Estudiante de sexto año de Medicina. Alumno ayudante de Neonatología.
3Estudiante de sexto año de Medicina.
4Especialista de Primer Grado en Medicina Interna. Máster en Urgencias Médicas. Instructor.
RESUMEN
Introducción: el término traumatismo procede y se deriva del griego trauma, que
significa herida, que es un término general que comprende todas las lesiones, psicológicas u
orgánicas, internas o externas y sus consecuencias locales o generales para el organismo, que
son causadas por la acción de cualquier tipo de agente vulnerante externo o interno. El
traumatismo como enfermedad representa un problema de salud pública mayor. El Servicio de
Emergencia del Policlínico Pedro Borrás Astorga no se escapa de esta problemática.
Objetivo: caracterizar el traumatismo en la Atención Primaria de Salud, servicio de
emergencia del Policlínico Universitario "Pedro Borrás Astorga", febrero 2012 a febrero 2013.
Métodos: se realizó una investigación observacional, descriptiva y transversal en el
Policlínico Universitario "Pedro Borrás Astorga". Se empleó una muestra de 172 pacientes; los
datos fueron obtenidos a través de fuentes secundarias; se emplearon métodos de
estadística descriptiva e inferencial aplicando Chi-x².
Resultados: se observó un predominio de pacientes entre 36 y 60 años de edad (34,9%)
en ambos sexos (33,3% y 36% respectivamente), la mayoría de los traumatismos fueron
causados por caída (37,8%). Predominó la contusión (41,3%) y la región de mayor afectación
fue de miembro superior (30,2%); la mayoría de los traumatismos ocurrieron en el hogar (48,3%).
Conclusiones: a pesar de los logros alcanzados en Pinar del Río en relación a esta
problemática, es una realidad que el traumatismo a diferentes niveles continúa incidiendo con
altas frecuencias en los Servicios de Emergencia de la Provincia.
DeCS: Heridas y traumatismos; Atención primaria de salud.
ABSTRACT
Introduction: trauma represents a serious public health problem. Emergency service at
Pedro Borrás Astorga Polyclinic is not out of this problem.
Objective: to characterize traumas in primary health care in the emergency service at
Pedro Borrás Astorga Polyclinic from February 2012 to 2013.
Methods: an observational, descriptive and cross-sectional research was carried out
making use of a sampling target group (n=172). Data were collected from secondary sources.
Age, sex, causes were the variables included, among others. To its analysis descriptive
and inferential statistics was used applying chi square test.
Results: patients between 36-40 years old (34.9%) predominated in sexes, 33.3% and
36% respectively and most of the trauma cases were as a cause of fall (37.8%).
contusion prevailed (41.3%), upper limbs were the most affected (30.2%) and the majority of
traumas occurred at home (48.3%).
Conclusions: despite the advances achieved in Pinar del Río in relation to this
problem, trauma continues its incidence with high frequencies in emergency services all over
the province.
DECS: wounds and injuries; primary health care.
INTRODUCCIÓN
El traumatismo como enfermedad representa un problema de salud pública mayor.1 El término traumatismo procede y se deriva del griego trauma, que significa herida, que es un término general que comprende todas las lesiones, psicológicas u orgánicas, internas o externas y sus consecuencias locales o generales para el organismo, que son causadas por la acción de cualquier tipo de agente vulnerante externo o interno.2
La gravedad de las lesiones traumáticas no depende solamente de la variedad, tipo y características del agente que las produce, sino también de otros factores, tales como la posición del lesionado en el momento de su producción, el ambiente en que se produjo el traumatismo, la región y el o los órganos afectados, la multiplicidad e interacción fisiopatológica de las lesiones sufridas, las enfermedades pre-existentes, el estado general del herido y , de gran importancia, del tiempo transcurrido entre la producción de la lesión y el comienzo y calidad de la atención médica recibida. 2
Las principales lesiones traumáticas del sistema osteomioarticular (SOMA) se clasifican en contusiones: lesión que se produce cuando un objeto romo golpea algún área de nuestro cuerpo o cuando nuestro cuerpo en su desplazamiento es proyectado contra algún objeto de ese tipo, esguinces: lesión que se produce cuando un movimiento forzado de la articulación más allá de los límites normales lesiona los elementos capsulares o ligamentosos, luxaciones: se produce cuando los extremos óseos que forman una articulación se hallan totalmente separados, de forma que la oposición de uno y otro se ha perdido (las superficies articulares no mantienen contacto) y fracturas: es la ruptura de la continuidad ósea.3
En el papiro egipcio encontrado por Edwin Smith y atribuido al médico y arquitecto Imhotep (3000-2500 a.n.e.), se habla de 48 casos de traumatismos, 44 de los cuales eran graves, ordenados "de la cabeza al calce". Homero, en la Ilíada (1000 a.n.e.) hace la primera referencia a la atención organizada en el campo de batalla, mencionando 147 heridas, con una mortalidad del 77%. Posteriormente los romanos hacen referencia en los siglos I y II a la atención de sus heridos en zonas o lugares especiales fuera del campo de batalla. 4
En la guerra civil de los Estados Unidos los tiempos de traslados de los heridos eran de días y la mortalidad global fue de más de un 14%. Ya en la guerra de Corea, los norteamericanos lograron desarrollar la terapia anti-shock y lograron un traslado rápido de sus heridos hasta hospitales quirúrgicos móviles, llevando el tiempo de atención primaria hasta 2 a 4 horas para reducir la mortalidad global a 2,4%. 4 Por lo que se puede deducir la enorme importancia que tiene el tiempo que media entre el momento en que se produce la lesión y su atención inicial o definitiva, cuyo tiempo ha sido llamado por el comité de trauma del Colegio Americano de Cirujanos "los treinta minutos de oro", para conseguir el cual es necesaria una capacitación adecuada con el aprendizaje de las medidas y habilidades que puedan cumplir ese objetivo. 5
Es la principal causa de muerte durante la primera mitad de la vida y la cuarta causa para todos los grupos de edad. En las personas menores de 34 años el traumatismo es responsable de más muertes que todas las enfermedades juntas. 1
Aunque la incidencia varía con las diferentes áreas geográficas, alrededor de 200 personas sufren TCE por cada 100.000 habitantes. Afecta más a varones (en relación 2:3) debido a los diferentes roles y conducta social de uno y otro sexo. La edad de máximo riesgo se sitúa entre 15 y los 30 años, razón por la cual genera enormes pérdidas en años potenciales de vida. Se considera que por cada 250 a 300 TCE leves hay de 15 a 20 moderados y de 10 a 15 graves, lo que conlleva altos costes económicos y sociales. 6-9
La mortalidad en un traumatismo torácico grave oscila entre el 4 y 12 %, si se acompaña de lesión en otra parte aumenta del 12 al 15 % y si hay lesión multiórgano se eleva entre el 30 y 35 %. 1, 3,4 En los traumatismos penetrantes es del 13,4 % y en los cerrados, del 20,4 %.6 Otros autores informan el 9 % por proyectiles de alta velocidad; 7 se eleva al 34 % si hay lesiones de los vasos subclavios, 8 y al 36,8 % si existe lesión de la arteria pulmonar. 10
En Cuba el trauma constituye la cuarta causa de muerte, con una tasa bruta de mortalidad de 47.4 x 100 000 habitantes durante el año 1998, pero representó la primera causa de muerte en las personas menores de 40 años y la principal causa de años de vida potencialmente perdidos por 1000 habitantes con un valor de 8.5 por 1000 habitantes. En la provincia de Holguín la mortalidad fue de 42 x 100 000 habitantes. 11
En Cuba se han realizado estudios que demuestran que los accidentes constituyen la primera causa de muerte en las edades comprendidas entre 1 y 49 años 12-14 y que los accidentes del tránsito son responsables de más del 60% de los politraumatizados. El traumatismo craneoencefálico (TCE) está presente en el 70% de los mismos, y es además responsable de dos tercios de las muertes que se producen en menores de 41 años. 15-17
A pesar de los logros alcanzados en Pinar del Río en relación a esta problemática, es una realidad que el traumatismo a diferentes niveles continúa incidiendo con altas frecuencias en los Servicios de Emergencia de la provincia, de lo cual no escapa el Policlínico Pedro Borrás Astorga. Dado este contexto se plantea como objetivo caracterizar el traumatismo en la Atención Primaria de Salud en el intervalo febrero 2012 - febrero 2013 en el servicio de emergencia del Policlínico Pedro Borras Astorga.
MÉTODOS
Se realizó un estudio observacional, descriptivo y transversal en el Servicio de Emergencias del Policlínico "Pedro Borrás Astorga" en Pinar del Río en el periodo comprendido entre febrero 2012 y febrero 2013. El universo quedó constituido por 186 pacientes con diagnóstico de traumatismo. Se aplicaron como criterio de inclusión: los pacientes traumatizados que llegaron vivos al servicio de emergencia. Se excluyeron: los pacientes que fallecieron mientras se les prestaba asistencia médica en emergencia y aquellos cuya información en la historia clínica estaba incompleta.
De acuerdo a los criterios de inclusión y exclusión se estudiaron 172 pacientes; constituyendo la muestra de estudio.
Los datos fueron extraídos del libro de control de pacientes y las historias clínicas individuales; fueron llevados a una base de datos en programa estadístico SPSS versión 12.
Las variables fueron procesadas mediante los métodos de estadística descriptiva e inferencial, se determinaron frecuencias, por cientos y se realizaron tablas de contingencia aplicándose el test Chi-cuadrado para comprobar asociación entre variables. Se asumió ?=0,05.
Aspectos éticos
Se explicó a los pacientes que los datos obtenidos en la investigación serian empleados con fines estrictamente científicos y sólo serían socializados en eventos o publicaciones médicas cuidando su identidad. Se obtuvo el consentimiento informado de los pacientes previo al ingreso en el estudio.
RESULTADOS
Obsérvese un predominio de pacientes entre 36 y 60 años de edad, para una significación
del 34,9% del total. El sexo masculino tubo una mayor prevalencia que el femenino. Tabla 1
La tabla 2 muestra un predominio de pacientes traumatizados por caída (37,8% de
representación en relación al total). Estadísticamente se puede observar que no existe una
asociación significativa entre la edad y la causa del traumatismo (x²=10,328 G.L: 12 p=0,587>α). Tabla 2
Se obtuvo un predominio general de pacientes con contusiones para un 41,3%,
alcanzando su frecuencia más alta en traumatizados entre 36 y 60 años (18%), seguido de
pacientes heridos para un 33,1%, representado principalmente por los pacientes entre 20 y 35 años.
Al aplicar la prueba estadística de Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las
variables estudiadas (x²=27,289 G.L: 16 p=0,038< α). Tabla 3
La mayoría de los pacientes presentaron traumatismo de miembros superiores con un
30,2%, representado por el grupo de 20 a 35 años (11,6%) seguido de los traumatizados con
afectación craneofacial (27,3%), sobre todo en el grupo de 36 a 60, con un 9,3%.
Al aplicar la prueba estadística de Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las
variables estudiadas (x²=26,866 G.L: 16 p=0,043 < α). Tabla 4
Observe un predominio de pacientes que sufrieron el traumatismo en el hogar con un
48,3%, en su mayoría representado por el grupo etario de 36 a 60 años. En segundo lugar se
encuentran los traumatismos en carretera con un 34,9%, predominando el grupo
comprendido entre los 20 y 35 años de vida.
Al aplicar la prueba estadística de Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las
variables estudiadas (x²=23,254 G.L: 12 p=0,026 < α). Tabla 5
DISCUSIÓN
En la investigación se pudo observar un predominio de pacientes entre 36 y 60 años de
edad del total de traumatizados, siendo este grupo etario el más representativo tanto en el
sexo femenino como en el masculino. Este resultado se puede explicar por el hecho de que
Cuba es un país de población eminentemente adulta, además los pacientes traumatizados de
las edades extremas de la vida, ya sea por exceso o por defecto, casi siempre en estas
situaciones son atendidos principalmente por los centros de atención secundaria, aún más
cuando está en peligro la vida del paciente. Estadísticamente se pudo comprobar que existe
una asociación entre la edad y el sexo de estos pacientes, o sea, que generalmente los
pacientes traumatizados de ambos sexos que llegan al servicio de emergencias van a estar en
este rango de edades, lo que nos permite prepararnos aún mejor en los aspectos que
caracterizan a este grupo erario, a fin de mejorar la atención médica en estos casos, sin descuidar
la preparación que se debe tener dirigida a paciente de otras edades.
Al comparar nuestros resultados con otros autores se encontró predominio de la
población joven en edad laboralmente activa, Domínguez Peña et al. obtuvieron resultados muy
similares incluso con una población más
pequeña.15
Otros autores 7,11 reportan mayor número de pacientes entre 25 y 34 años de edad,
argumentando que este este rango poblacional se encuentra en su plena capacidad laboral.
Resultados similares reporta Helmy A y colaboradores, donde la mayor incidencia en
hombres jóvenes por la integración del hombre a las actividades potencialmente peligrosas
o predisponentes de traumatismos incluyendo los militares. Es la etapa de la vida laboral
más activa, de mayor exposición a riesgos con menor conciencia de los mismos y
sobrevaloración de las capacidades, acompañado todo esto de desconocimiento, falta de habilidades y
el desuso o uso inadecuado de los medios de protección en los traumatismos
laborales.18
Se constata predominio de pacientes traumatizados por caída. Indicando la necesidad
de elaborar acciones educativas a fin de lograr que la población lleve una vida menos
agitada, en la cual se tengan las precauciones necesarias a la hora de realizar cualquier
acción. Estadísticamente se puede observar que no existe una asociación significativa entre la
edad y la causa del traumatismo, o sea, que como mismo predominó la caída en otro
momento puede predominar cualquier otra caso en el mismo grupo de edades (en cualquier edad
se presenta cualquier causa) para lo que hay que estar preparados.
En cuanto a esto encontramos opiniones coincidentes
19 y divergentes 20 con
nuestros resultados. No obstante Naranjo y Portero
21 anuncian la caída en las primeras causas
relacionadas estrechamente con la edad del paciente.
Otros autores plantean los accidentes como el primer mecanismo de producción del
trauma, seguido de las caídas y afecta a los miembros más jóvenes y productivamente activos;
estos resultados son similares a los obtenidos por otros investigadores según la literatura
consultada, 22, 23 y tenga en cuenta la inversión de frecuencia en cuanto a nuestros
resultados, pues se obtuvo que la mayor cantidad de pacientes presentaron una caída.
Se obtuvo un predominio de pacientes con contusiones que alcanzan su frecuencia más
alta en traumatizados entre 36 y 60 años de edad; se puede justificar por el hecho de que
la mayoría de los pacientes que llegan a este servicios presentan lesiones leves producto
de caídas simples o choque con algún objeto romo sin ocasionar grandes afectaciones.
Seguido se encuentran los pacientes heridos, representado principalmente por los pacientes entre
20 y 35 años, edad propensa a las riñas, el uso de armas blancas para la defensa personal y
las propias actividades laborales e incluso las hogareñas sobre todo en las féminas. Al aplicar
la prueba estadística de Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las variables estudiadas.
La mayoría de los pacientes presentaron traumatismo de miembros superiores con un
30,2% representado por el grupo de 20 a 35 años (11,6%); los miembros superiores son la región
del cuerpo que utilizamos la mayoría de las veces para amortiguar o evitar lesiones graves
en otras partes del cuerpo, como por ejemplo la cabeza, la cual sale muy lastimada si no
se logra poner los brazos a tiempo, seguido a esta se encuentran los traumatizados con
afectación craneofacial (27,3%) sobre todo en los grupos etarios de 36 a 60 con un 9,3%, y
es que a medida que vamos envejeciendo la respuesta motora va disminuyendo debido a
los cambios degenerativos propios de este proceso biológico. 3 Al aplicar Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las variables estudiadas, lo que quiere decir que en los pacientes de 36
a 60 años la mayor frecuencia de traumatismo va a ser craneofacial y en el grupo de 20 a
35 será miembros superiores.
En los trabajos de Haller 20 y Ndiave
24 la localización principal de las lesiones
fue craneoencefálica, lo que difiere de los resultados obtenidos; aunque se debe tener en
cuenta que su estudio fue realizado en un centro de atención secundaria donde llegan los casos
más graves y precisamente el TCE es generalmente el que puede llevar con mayor facilidad a
la muerte.
Se pudo observar un predominio de pacientes que sufrieron el traumatismo en el hogar
con un 48,3%, representado en su mayoría por el grupo etario de 36 a 60 años con un 15,7%
del total de traumatizados. Seguido en frecuencia se encuentran los traumatismos en
carretera con un 34,9% predominando en el grupo de 20 a 35 años. Al aplicar la prueba estadística
de Chi-cuadrado se obtuvo asociación entre las variables estudiadas.
Algunos autores25, 26 plantean un 58.6% de casos de accidentes del tránsito, casi
siempre asociados a la ingestión de bebidas alcohólicas, mostrando incluso una reacción
significativa entre el tipo de accidente y la ingestión de bebidas alcohólicas según chi cuadrado;
claro que hay que tener en cuenta que este estudio no fue realizado en un centro de
asistencia secundaria. Otros 27, 28 muestran resultados similares, sobre todo relacionados
con traumatismos leves, los cuales se presentan con gran frecuencia durante la realización
de actividades domésticas.
El traumatismo es un problema de salud que continúa perturbando a escala mundial el
bienestar de la población. Se obtuvo un predominio de pacientes entre 36 y 60 años de edad
en ambos sexos, con traumatismo causados principalmente por caída. Donde también
predominó la contusión como tipo de lesión, no siendo así en los casos de heridos, que predominaron
de 20 a 25 años. La región de mayor afectación fue de miembro superior seguido de
la craneofacial, y la mayoría de los traumatismos ocurrieron en el hogar. Se pudo
probar estadísticamente que existe asociación entre la mayoría de estas variables con respecto a
la edad del paciente, excepto en el caso de la causa desencadenante probablemente por
características particulares de la población estudiada. Elementos que permiten concluir que
a pesar de los logros alcanzados en Pinar del Río en relación a esta problemática, es una
realidad que el traumatismo a diferentes niveles continúa incidiendo con altas frecuencias en
los Servicios de Emergencia de la Provincia.
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Datos para correspondencia
Francisco Juan Pérez Llabona. Estudiante de tercer año de Medicina. Alumno ayudante
de Medicina Interna. Facultad de Ciencias Médicas ¨Ernesto Che Guevara de la Serna¨
Universidad de Ciencias Médicas. Pinar del Río.
Correo electrónico:dravilma@princesa.pri.sld.cu
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